¡Escuchen, señoras! Consumir más de 350 ml de cola al día puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas

Beber 12 onzas de bebidas azucaradas tiene efectos nocivos para la salud cardíaca de los adultos.

Esa caminata informal al supermercado para comprar unas cuantas botellas de bebidas gaseosas puede no ser lo que su corazón desea. Porque ¿adivinen qué? Con el consumo cada vez mayor de refrescos ricos en calorías, todos esos edulcorantes artificiales con los que se mezcla tu cola favorita poco a poco comienzan a aumentar los niveles de colesterol en tu cuerpo. 

De hecho, un estudio publicado en el Journal of the American Heart Association dice que beber sólo 12 onzas de bebidas azucaradas (es decir, alrededor de 350 ml) más de una vez al día puede reducir los niveles de HDL y aumentar los triglicéridos. Ambos aumentan el riesgo de enfermedad cardiovascular (ECV).He aquí por qué es importante mantener un equilibrio entre el colesterol bueno y el maloEl HDL, también conocido como lipoproteína de alta densidad, a menudo se Considerado como colesterol bueno debido a su capacidad para eliminar otros tipos de colesterol del torrente sanguíneo. Es por este motivo que se considera saludable para el corazón. LDL o lipoproteína de baja densidad, por otro lado, es responsable de la acumulación de placa en las arterias. Y los triglicéridos endurecen las arterias. Juntas, ambas amenazas aumentan las posibilidades de sufrir un ataque cardíaco.

Así es como entran en juego las colas azucaradasA lo largo de los años, una gran cantidad de estudios han relacionado el azúcar añadido en los alimentos con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular. Y esta investigación es sólo otra gota en el océano.

“La investigación refuerza nuestra comprensión del posible impacto negativo de las bebidas azucaradas en el colesterol en sangre, lo que aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas”, dice el investigador del estudio Eduardo Sánchez de la Asociación Estadounidense del Corazón.

Según los investigadores, la dislipidemia (una cantidad anormal de lípidos en el cuerpo) podría ser la razón por la cual las bebidas azucaradas aumentan el riesgo de ECV. Para determinar el impacto de las bebidas azucaradas en los niveles de triglicéridos y colesterol, los investigadores estudiaron datos médicos observacionales de 5.924 personas de las cohortes Offspring y Generation 3 del Framingham Heart Study, que fueron seguidas durante 12,5 años entre 1991 y 2014.

Para este estudio, las bebidas se agruparon en 12 onzas de bebidas azucaradas, como refrescos, bebidas con sabor a frutas, bebidas deportivas, café endulzado y té; 12 onzas de bebidas endulzadas bajas en calorías, incluidas las gaseosas “dietéticas” endulzadas de forma natural y artificial u otras bebidas saborizadas; y 8 onzas de jugos 100% de frutas sin azúcar agregada.

Este es el impacto variado del consumo de refrescos altos y bajos en calorías en la salud del corazón Los investigadores analizaron cómo las diferentes bebidas y su consumo se correlacionaban con los cambios en los niveles de colesterol y triglicéridos durante cuatro años.

Descubrieron que consumir bebidas azucaradas (más de 12 onzas al día) estaba relacionado con un 53 % más de incidencia de triglicéridos altos y un 98 % mayor incidencia de colesterol HDL bajo en comparación con aquellos que consumieron menos de una porción al mes.

Beber bebidas endulzadas bajas en calorías no pareció estar asociado con un mayor riesgo de dislipidemia entre las personas que consumían regularmente bebidas endulzadas bajas en calorías.

Según el estudio, consumir hasta 12 onzas de jugo 100 % de fruta al día no se asoció con cambios adversos en el colesterol o la dislipidemia, aunque se necesita más investigación para justificar este hallazgo.

“Reducir o eliminar el consumo de bebidas azucaradas puede ser una estrategia que podría ayudar a las personas a mantener sus triglicéridos y colesterol HDL en niveles más saludables”, dijo la autora principal del estudio, Nicola McKeown, de la Universidad de Tufts en Estados Unidos.

El resultado final… Ahora, seamos honestos con nosotras mismas, señoras. Aunque esta investigación toma en cuenta a los estadounidenses de mediana edad y mayores, consumimos la misma cantidad de bebidas endulzadas en un día, si no más. Es hora de que reexaminemos nuestra elección de bebida preferida y evitemos por completo la opción de beber colas, o al menos que reduzcamos masivamente su consumo. Es una elección entre satisfacer únicamente tus papilas gustativas o cuidar tu cuerpo. ¡Así que elija sabiamente!