¡El yoga puede ayudarte a mantener a raya muchos problemas y uno de ellos son las líneas finas y las arrugas! Prueba estas seis asanas de yoga para tener una piel perfecta.
Una piel estupenda es un reflejo directo de nuestra salud. Sin embargo, nuestro estilo de vida moderno pone un mayor énfasis en el trabajo y la carrera, lo que a menudo nos lleva a descuidar nuestra salud y dejar que el estrés nos domine.
¿El resultado? Bueno, la destrucción causada por la hormona cortisol (hormona del estrés) puede provocar muchos problemas de salud y ni siquiera perdona a tu piel.
“Cuando el cuidado personal es secundario, nuestra salud se ve afectada, lo que provoca que la piel sufra acné y desarrolle signos prematuros de envejecimiento, como arrugas y líneas finas”, dice el renombrado entrenador de estilo de vida y experto en yoga, Grandmaster Akshar.
Sin embargo, se apresura a agregar que el yoga es una ciencia holística y puede rejuvenecer el cuerpo, mejorar el flujo sanguíneo y eliminar obstrucciones para agregue un brillo saludable a su piel y mantenga a raya el envejecimiento.
Recomienda las siguientes asanas de yoga, que deben mantenerse durante 30 segundos cada una y repetirse hasta 5 veces durante la práctica para sellar el trato:
1. Vajrasana
- Comience parándose derecho con los brazos a los lados del cuerpo.
- Inclínate hacia adelante y arrodíllate lentamente sobre tu colchoneta.
- Coloque la pelvis sobre los talones y apunte los dedos de los pies hacia afuera.
- Aquí, tus muslos deben presionar los músculos de tus pantorrillas.
- Mantenga los talones ligeramente separados uno del otro.
- Coloque las palmas de las manos sobre las rodillas mirando hacia arriba.
- Enderezar la espalda y mirar hacia adelante.2. Ustrasana
- Arrodíllate sobre la estera de yoga y coloca las manos en las caderas.
- Al mismo tiempo, arquea la espalda y desliza las palmas de las manos sobre los pies hasta que los brazos queden rectos.
- No fuerces ni flexiones el cuello. Simplemente manténgalo en una posición neutral.
- Exhala y lentamente vuelve a la postura inicial. Retira las manos y llévalas de regreso a las caderas mientras te enderezas.
- 3. Halasana
- Acuéstese boca arriba.
- Coloque las palmas de las manos en el suelo al lado de su cuerpo.
- Usando los músculos abdominales, levante las piernas 90 grados.
- Presione firmemente las palmas de las manos contra el suelo y deje que las piernas caigan detrás de la cabeza.
- Permita que la espalda media y baja se levanten del piso para permitir que los dedos de los pies toquen el piso detrás. Intenta acercar tu pecho lo más posible a tu barbilla.
- Las palmas de las manos pueden permanecer planas en el suelo, pero se pueden doblar los brazos a la altura del codo y apoyar la espalda con las palmas según su nivel de comodidad.
- 4. Santolanasana
- Acuéstese boca abajo.
- Coloque las palmas de las manos debajo de los hombros y levante la parte superior del cuerpo, la pelvis y las rodillas.
- Agarre el suelo con los dedos de los pies.
- Estire las rodillas.
- Asegúrese de que sus rodillas, pelvis y columna estén alineadas.
- Tus muñecas deben estar exactamente debajo de tus hombros con los brazos rectos.
- 5. Padahasthasana
- Comience por permanecer quieto y derecho.
- Exhala y dobla suavemente la parte superior del cuerpo, dejando caer la cabeza y manteniendo los hombros y el cuello relajados.
- Intenta tocar las rodillas con la frente. Esto puede requerir mucha flexibilidad. Si estás empezando tu práctica, ve sólo hasta donde te resulte cómodo.
- Cuando esté inclinado hacia adelante, intente mover el torso desde las articulaciones de la cadera, en lugar de la cintura.
- Coloque las palmas de las manos a cada lado de los pies.
- Intenta mantener las piernas y rodillas rectas durante toda la práctica. Si eres principiante, es posible que tengas que doblar ligeramente las rodillas para lograrlo.
- Con práctica, estire lentamente las rodillas e intente tocar los muslos con el pecho.
- 6. Sirshasana
- Comience asumiendo Vajrasana.
- Coloque los codos en el suelo.
- Forma un triángulo equilátero con las palmas y los codos entrelazados.
- Coloque la coronilla de su cabeza en el suelo frente a sus palmas.
- Tus palmas deben actuar como soporte para la parte posterior de tu cabeza.
- Camine de puntillas hacia la cabeza hasta que la espalda se enderece.
- Primero, levante la pierna derecha y alinéela con la parte superior del cuerpo.
- Utilice su fuerza central y su equilibrio y levante la pierna izquierda.
- Junte las piernas y apunte los dedos de los pies hacia abajo.
- Entonces, señoras, ¡practiquen estas asanas para lograr una piel suave y radiante!(P.D.: evita las asanas complicadas si sufres algún problema de espalda o de presión arterial)